Por Carolyn Operacz, Nutricionista/Directora de WIC
El comienzo de un nuevo año es la oportunidad perfecta para adquirir hábitos nuevos. La segunda resolución más popular de año nuevo es comer más sano. Parte de "comer más sano" puede incluir cambiar la FORMA en la que te alimentas. Sin siquiera cambiar los alimentos que comes, al ser más consciente, puedes comenzar el cambio hacia una alimentación más sana.
Se ha estudiado que comer con distracciones, como ver la televisión o navegar por redes sociales, puede hacer que comas en exceso o te des atracones. Trata de comer al menos 1 de tus comidas al día en la mesa con tu familia o, si vives solo, escuchando un poco de música relajante.
Elije un plato más pequeño del que probablemente usarías. Generalmente sentimos una presión interna de comer todo lo que está en nuestro plato. Con un plato más pequeño, probablemente te servirás menos comida. Intenta que la mitad de tu plato esté compuesto por vegetales, un cuarto por proteínas y un cuarto por carbohidratos.
Antes de comer, tómate un minuto para apreciar de dónde proviene la comida. Las personas involucradas en cultivar, preparar, empaquetar y cocinar los alimentos. Come de forma lenta, escuchando las señales de tu cuerpo que te hacen saber que estás lleno.
Si te obligas a anotar todo lo que comes en el día, es posible que tomes mejores decisiones, especialmente cuando se trata de comer bocadillos o comer por aburrimiento.
Un gran cambio en los hábitos alimentarios no tiene por qué producirse de golpe. Pequeños cambios sostenidos en el tiempo pueden conducir a un mayor éxito. Siempre se amable contigo mismo. Está bien que te tomes un día de descanso. Cuanto más practiques la alimentación consciente, más sanos serán tus hábitos alimentarios.
Para más información, llame a nuestro nutricionista de LBU WIC para comenzar hoy! (214)761-0956