El síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL) es un fenómeno trágico e inexplicable que se cobra la vida de bebés menores de un año, generalmente mientras duermen. Como padre, el miedo al SMSL puede ser abrumador. La buena noticia es que, si bien aún se desconoce su causa exacta, las investigaciones han identificado varias maneras de reducir el riesgo y ayudar a crear un ambiente de sueño seguro para tu bebé.
El SMSL se define como la muerte súbita e inexplicable de un bebé sano, a menudo mientras duerme. Según la Academia Americana de Pediatría (AAP), ciertos factores pueden aumentar el riesgo:
Posición para dormir: Colocar a los bebés boca abajo o de lado aumenta el riesgo.
Entorno para dormir: La ropa de cama blanda, el sobrecalentamiento y la exposición al humo pueden contribuir.
Edad y prematuridad: Los bebés menores de 6 meses y los prematuros tienen mayor riesgo. Consejos para reducir el riesgo de SMSL
Siempre coloca a tu bebé boca arriba para dormir, incluyendo las siestas. Según la AAP, esta es la manera más efectiva de reducir el riesgo de SMSL.
Usa un colchón firme con una sábana ajustable en una cuna o moisés con certificación de seguridad. Evita ropa de cama blanda, almohadas, peluches y protectores de cuna. Mantén una temperatura ambiente agradable y viste a tu bebé con un saco de dormir u otra manta para evitar el sobrecalentamiento.
Mantén tu hogar libre de humo durante el embarazo y después del parto. Evita exponer a tu bebé al humo de segunda mano y no fumes ni consumas alcohol ni drogas recreativas durante el embarazo ni después del nacimiento.
Asiste a controles prenatales regulares para reducir el riesgo de parto prematuro y bajo peso al nacer, ambos asociados con un mayor riesgo de SMSL.
La lactancia materna se ha relacionado con un menor riesgo de SMSL. Si es posible, amamante a su bebé.
Considere ofrecerle un chupete durante la siesta y a la hora de dormir. Si está amamantando, espere hasta que la lactancia esté bien establecida (alrededor de 3 a 4 semanas) antes de introducir el chupete.
Permita que su bebé pase tiempo boca abajo regularmente y bajo supervisión cuando esté despierto y alerta. Esto fortalece los músculos del cuello y los hombros y favorece el desarrollo motor general.
Si bien estas medidas pueden ayudar a reducir el riesgo de SMSL, es fundamental mantenerse informado sobre las últimas recomendaciones de autoridades de confianza como la AAP, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) y los Institutos Nacionales de la Salud (NIH). Estas organizaciones revisan periódicamente las nuevas investigaciones y actualizan sus directrices.
Proteger a su hijo del SMSL se trata de estar alerta y crear un entorno de sueño seguro y acogedor. Siguiendo las recomendaciones basadas en la evidencia y trabajando en estrecha colaboración con su pediatra, puede reducir el riesgo y ayudar a garantizar un comienzo saludable para su bebé.
Recuerde que cada bebé es diferente y siempre es recomendable consultar a su pediatra para obtener consejos y orientación personalizados.
Academia Americana de Pediatría: Sueño seguro para bebés
Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC): SMSL y muerte súbita infantil inesperada (SUID)
Institutos Nacionales de la Salud (NIH): Dormir seguro®